Luka Doncic, ¿All-Star?
Esta temporada, ha llegado a la NBA un jugador que está llamado a ser el futuro de la liga, uno de esos chicos llamados a marcar una época en la mejor liga del mundo. Con la tercera elección del pasado draft, los Atlanta Hawks elegían, para después traspasarlo a Dallas Mavericks, a un Luka Doncic que venía de ganarlo todo en Europa. Muchos eran los que dudaban del nivel que ofrecería el esloveno al otro lado del charco. Que si no tiene físico, que si su juego no se adaptaría al estilo estadounidense… Críticas que el jovencísimo jugador ha ido disipando una tras otra. Se ha erguido como el jugador franquicia de los Mavs, y ha surgido el debate de si debería ser seleccionado o no para jugar el All-Star Game el próximo día 18 de febrero.
¿Por qué surge esta pregunta?
Intentando ser lo más objetivo posible, Luka Doncic se ha ganado por méritos propios estar en esta conversación. Si nos vamos a sus estadísticas básicas, sus 20.5 puntos, 6.9 rebotes y 5.4 asistencias en 32.1 minutos por partido, dan al menos para pensárselo. Nos ha dejado actuaciones para el recuerdo para un rookie, como el día que metió 11 puntos en menos de dos minutos para vencer a Houston. Hace unos días se convirtió en el primer jugador de la historia de la NBA en hacer dos triples dobles antes de llegar a los veinte años (ambos partidos saldados con derrotas, todo sea dicho), locuras que nos dan ganas de pedir a gritos que el joven esloveno sea seleccionado para el partido de las estrellas.
HOU-DAL (11 pts consecutivos de Doncic para ganar)
Cuando vemos un partido de Dallas, no cabe duda de quién es el líder del equipo. Es la primera opción ofensiva y le ha comido la tostada a un Dennis Smith Jr. cuya salida ha llegado incluso a estar encima de la mesa. De los 11 partidos que ha jugado Luka en los que ha anotado 14 puntos o menos, Dallas tan sólo ha conseguido ganar tres (27%), mientras que de los 37 en los que sí ha alcanzado dicha cifra, Dallas ha ganado 18, es decir el 48.6%. Cuando juega bien, el equipo lo nota. Cuando juega mal, también.
Además, se ha convertido en una de las caras de la NBA. No en vano, ha sido el tercer jugador de toda la NBA que más votos ha recibido por parte de los aficionados para ser titular en el All-Star game, con la friolera de 4.242.980 votos. El aficionado medio de la NBA le quiere, está claro. Su cara está, especialmente en España, en todas las noticias, en todos los tweets, allá donde miremos. Luka se ha convertido, sin lugar a dudas, en una estrella también fuera de la pista.
Y entonces, ¿Qué duda tienes?
Hasta ahora, todo parece indicar que Doncic debería ser seleccionado para jugar el partido y ser así el primer novato desde Blake Griffin en lograr dicha hazaña. Entonces, ¿Dónde está el problema? Bien, el problema no está tanto en Luka Doncic, como en la competencia que tiene en la durísima conferencia oeste. Veamos los posibles competidores que tiene, y si pueden acudir antes que él a esta cita o no. Intentaré no entretenerme en los que considero que tienen una posición fija para el partido de las estrellas, y argumentar más a fondo en los que tal vez pueda haber más duda.
ANTHONY DAVIS
“La ceja” es ya un habitual en estas citas. Sus salvajes estadísticas (29.3 puntos, 13.3 rebotes, 4.4 asistencias, 1.7 robos y 2.6 tapones en 37.0 minutos de juego), así como una impresión de dominio absoluto en ataque y de hacer lo que quiere en cada partido no dan pie a ninguna duda sobre que el ex de la universidad de Kentucky será uno de los elegidos para disputar este partido. Sólo lo mal rodeado que está nos impide ver a un Anthony Davis capaz de luchar por un campeonato en New Orleans. No me entretendré mucho en este punto, puesto que no hay mucho debate aquí.
RUSSELL WESTBROOK
Hablando de monstruos estadísticos, nos toca hablar del base de Oklahoma City Thunder. Con 35.4 minutos por noche, promedia 21.6 puntos, 10.8 rebotes (máximo de carrera), 10.7 asistencias (máximo de carrera) y 2.4 robos (máximo de carrera). Estamos ante una posibilidad real de que un jugador promedie un triple doble por tercera temporada consecutiva. Se dice pronto. Este año ha relegado más responsabilidades en su compañero y titular en el próximo All-Star Game, Paul George, lo cual ha repercutido en sus estadísticas de puntos y sus estadísticas avanzadas (gran bajón en PER, Win Share o BPM por ejemplo), pero está consiguiendo muchísimos más éxitos colectivos, con un récord de 31-18, terceros en la conferencia oeste, y posiblemente el equipo de Oklahoma que más miedo da desde la salida de Kevin Durant.
NIKOLA JOKIC
La cosa va de triples dobles y jugadores completos, y a esta fiesta no podía faltar “The Joker”. Un jugador con un físico peculiar para jugar en la NBA, está guiando a unos sorprendentes Denver Nuggets a una segunda posición (34-15) en la conferencia oeste que no esperaba casi nadie. 20.1 puntos, 10.4 rebotes y 7.7 asistencias en “tan solo” 31.2 minutos por juego para este pívot que ejerce de base de su equipo. Con 7 triples dobles a sus espaldas esta temporada (entre ellos uno sin fallo en el tiro), no es sólo en la estadística básica donde destaca, sino también en la avanzada (todas las estadísticas avanzadas han sido extraídas de la web basketball-reference.com): sexto jugador en toda la NBA con mejor Win Share (7.4), cuarto con mejor PER (27,4), y segundo con mejor BPM (+10.1). El talento personificado, que en pista da siempre una sensación de controlar los ritmos del partido a su gusto.
RUDY GOBERT
Ya es hora de que al francés le sean reconocidos sus méritos. Resulta sorprendente cómo un jugador tan importante en el esquema de un equipo competitivo como Utah nunca ha conseguido colarse entre los 12 escogidos para disputar el partido de las estrellas en el oeste. Si bien sus estadísticas básicas son relativamente discretas (15.0 puntos, 12.9 rebotes y 2.2 asistencias en 31.7 minutos por noche), un rápido vistazo a la estadística avanzada nos deja impresionados: Con él en pista, el equipo obtiene un rating ofensivo de 115.3, mientras que sin él es de 111.4, y un rating defensivo de 106.8, mientras que sin él es de 113.0 (haciendo el cálculo, el Net Rating es de +8.5 con él en pista, y de -1.6 sin él). Su Win Share es de 8.8 (mejor de la NBA), y su BPM de 7.4 (octavo en la NBA). Un jugador dominante a través de la defensa, que cambia por completo a su equipo con su sola presencia en pista. Basta con ver un partido de Utah para constatar la presencia que tiene el francés en la zona. Y para finalizar, ha liderado a su equipo a un récord de 29-22 hasta el momento, y la sexta posición en el salvaje oeste. Casi nada. Por récord del equipo y diferencia dentro y fuera de la pista, debería ser un fijo entre los elegidos.
DAMIAN LILLARD
El eterno infravalorado. Nadie tiene en cuenta a Portland a principio de temporada, nunca. Y después, siempre acaban colándose en los Playoffs, y en algunos casos como el pasado año, en una muy buena posición (entraron terceros, aunque luego fueron barridos en primera ronda por los Pelicans). Este año no iba a ser una excepción, y, como cada vez, el gran culpable de todo esto se llama Damian Lillard. 26.2 puntos, 4.5 rebotes y 6.2 asistencias en 35.3 minutos avalan la temporada de un Lillard que ya está haciendo habituales estos números curso tras curso. Este año, con un Nurkic evolucionado y un McCollum que sigue siendo su escudero perfecto (ambos podrían estar perfectamente en esta conversación), han llevado al equipo a ser cuartos en el oeste con 31 victorias y 20 derrotas, con un Lillard fundamental en cada victoria como refleja su estadística de Win Share (7.0, octavo mejor de la liga). Con Portland en el cuarto puesto de la conferencia, sería extraño que no tuviesen al menos un representante entre los elegidos.
TOBIAS HARRIS
21.1 puntos, 7.9 rebotes y 2.5 asistencias (todo máximos de carrera) para, probablemente, el jugador más infravalorado de la conferencia oeste (Lo siento Lillard, te quitaron el puesto). Alejado de los focos, con poca atención de la prensa, Tobias Harris está siendo el jugador franquicia de unos Clippers que maravillaron a principio de temporada, y a día de hoy siguen en posiciones de playoffs (octavos, 28-22). Fue el jugador del mes de octubre/noviembre en el oeste, donde promedió 21,7 puntos y 8,7 rebotes con un 44% en triples en los 21 partidos disputados, llevando a su equipo a un récord de 15-6. Además, está manejando los mejores porcentajes de su carrera en triples (43.2%), y eFG (Tiro de campo efectivo, con un 56.7%). La mejoría de este jugador en cuanto a acierto, anotación y liderazgo se refleja en los resultados del equipo, que con 5.0 de Win Share está siendo, junto con el banquillo y su compañero Gallinari, el principal motivo por el que los Clippers están luchando por los Playoffs esta temporada. Con unas estadísticas globales no mucho mejores (ni peores) que las de Doncic, el récord del equipo, y sobre todo su increíble inicio de temporada, podrían ser factores determinantes para escogerlo antes que al esloveno.
DEMAR DEROZAN/LAMARCUS ALDRIDGE
Parecía que este año los Spurs podían dejar de ser competitivos por primera vez desde hace dos décadas. Después de un comienzo un tanto titubeante, donde llegaron a asaltar muchas dudas a los tejanos, los pupilos de Popovich se han recompuesto para llegar al séptimo puesto de la conferencia oeste con un récord de 29-22. En un estilo de juego como siempre muy coral en la franquicia de las espuelas, destacan dos nombres por encima de cualquier otro, Demar DeRozan y LaMarcus Aldridge. El primero promediando 21.5 puntos, y sus máximos en rebotes (6.2) y asistencias (6.3), el segundo con 20.9 puntos, 8.6 rebotes y 2.6 asistencias, siendo los dos líderes del equipo. Actuaciones monstruosas como los 50 puntos de DeRozan para ganar a los Raptors, o los 56 de Aldridge para ganar a Oklahoma City, nos han dejado maravillados con estos dos jugadores. Al igual que en el caso de Harris, no son jugadores que destaquen por sus increíbles estadísticas, pero el récord del equipo podría ser clave para que al menos uno de los dos represente a los de San Antonio en esta cita en lugar del ex del Real Madrid.
KARL ANTHONY TOWNS
El caso del dominicano es algo extraño. Empezó la temporada mal, le costó carburar, pero poco a poco hemos vuelto a ver al jugador dominante, capaz de sumar números sin querer y ser una bestia ofensiva que conocíamos. 22.8 puntos, 12.2 rebotes y 3.1 asistencias, con un muy buen 38.5% en tiros de 3 puntos en 33.2 minutos ya serían motivo suficiente para tenerlo en cuenta en la conversación. Pero es que, estando en un equipo con récord negativo (24-26), la estadística avanzada nos deja ver lo importante que es este jugador, y lo dependiente que es su equipo de él: Con él en pista, sus ratings ofensivo y defensivo son, respectivamente, 116.1 y 113.7, mientras que sin él en pista son de 110.7 y 115.8, en otras palabras, un net rating de +2.4 con Towns en pista, y de -5.1 sin él. Especialmente llamativo es su mes de enero, donde con 25.8 puntos, 12.2 rebotes, 3.7 asistencias, 1.8 tapones, 1.2 robos en 31.7 minutos está liderando la resurrección de estos nuevos Timberwolves de Ryan Saunders, con un récord este mes de 7-6. Por importancia en su equipo, a pesar de la mala temporada (de momento), es muy probable que salga elegido.
DONOVAN MITCHELL
Después de haber hablado del ancla defensiva de los Utah Jazz, toca hablar sobre el líder ofensivo de este equipo. Después de hacer una temporada de novato sencillamente impresionante, donde únicamente un titán como Ben Simmons le impidió ser el novato del año, parecía que Mitchell nos traería más locuras este año. Cierto es que empezó el año mal, al igual que Utah en general, con malísimos porcentajes (por debajo del 43% en tiros de campo y del 30% en triples en noviembre y diciembre) y estadísticas muy por debajo de lo que nos acostumbró el curso pasado. No obstante, Mitchell ha renacido de sus cenizas y ha hecho un mes de enero para enmarcar: 28.1 puntos, 4.4 rebotes y 5.4 asistencias, con un 41.4% desde el triple en 35.5 minutos para guiar a Utah a un récord del mes de 11-3 y meterlo en posiciones de playoffs. De la mano del sophomore, Utah ha vuelto a ser el equipo que recordábamos el año pasado, esos a los que no quieres encontrarte nunca en una eliminatoria de playoffs. Sus estadísticas globales de la temporada son 22.5 puntos, 3.8 rebotes y 4.0 asistencias en 33.4 minutos por encuentro. Por el resurgimiento de Utah, por el récord del equipo, y por su increíble mes de enero, Mitchell postula una candidatura muy a tener en cuenta para ser elegido por encima de Doncic. Aunque, todo sea dicho, en caso de que Rudy Gobert salga elegido, tiene muy pocas posibilidades.
Otros jugadores a tener en cuenta
Aparte de estos nueve casos, que, para mí, han hecho méritos más que suficientes para estar en Charlotte el 18 de febrero, hay una serie de jugadores que también podrían hacerle competencia a Luka Doncic:
– Klay Thompson y Draymond Green podrían salir elegidos, esencialmente por el récord de unos Warriors que, un año más, se encuentran en lo más alto de la clasificación. No obstante, Thompson está manejando los peores porcentajes de su carrera desde el triple (nada menos que un 38%, que más querría media liga), y Draymond Green está en una temporada mucho más discreta, sobre todo estadísticamente hablando. Es cierto que si nos vamos a analizar estadísticas como los Off/DefRating, vemos que la importancia de Dray, sobre todo en el costado defensivo, sigue siendo titánica, y sobre todo, basta con ver un partido de los Golden State Warriors para constatar que sigue siendo el motor ofensivo del equipo, así como la principal pieza de su engranaje defensivo. Ahora bien, en un año con tanta competencia, es probable que ninguno de los dos salga elegido… Aunque quien sabe.
– DeAaron Fox y Buddy Hield están siendo los dos mejores jugadores de unos Sacramento Kings que, años después, están volviendo a ser competitivos. Hield está manejando el cuarto mejor porcentaje en tiros de tres de la NBA con un impresionante 45.7%, tirándose 7.4 triples por partido, no es moco de pavo, y está siendo el máximo anotador del equipo (20.2 puntos por encuentro). DeAaron Fox nos está dejando unos detalles de gran mejoría que confirman lo que se decía cuando iba a la universidad: es una futura estrella, siendo el máximo asistente (7.2 por partido) y ladrón (1.7 por partido) de su equipo. Con un récord de 25-25, sólo el hecho de estar en el oeste les impide estar en puestos de Playoffs, pero nadie duda que este joven equipo luchará por ello toda la temporada. Sin tener las estadísticas más impresionantes de la liga, si entrenadores y jugadores quieren premiar el duro trabajo de estos chicos y el resurgir de Sacramento, uno de los dos podría salir elegido perfectamente. Eso sí, tienen el mismo problema que Luka: la competencia.
– 24.5 puntos, 6.7 asistencias y 3.6 rebotes por partido son unas estadísticas para, al menos, echar un ojo a la temporada de Devin Booker. El joven jugador de Phoenix ha dejado sobradamente demostrado que es un hacha en ataque, con mil y un recursos para anotar. No obstante, tiene un problema grave, y es que está en un equipo que, a día de hoy, no compite por nada. Un paupérrimo record de 11-41 nos deja ver que este equipo aún es demasiado joven para luchar por nada. Además, Devin sólo ha mejorado en la categoría de asistencias (asiste dos veces más por encuentro que el año pasado, debido a su nuevo rol de creador de juego), habiendo pegado un importante bajón sobre todo en su mayor virtud: el porcentaje de triples, que se sitúa actualmente en un nada impresionante 31.9%. En global, la temporada de Booker está siendo muy similar a la del año pasado, individualmente una bestia, pero su equipo no va a ninguna parte. El año pasado, ya estuvo en la conversación por disputar el partido de las estrellas… Y no lo logró por esto mismo, con lo cual, este año dudo que sea distinto, ya que está haciendo cosas muy parecidas. Eso sí, no podemos borrar a semejante bestia anotadora de la lucha por participar en este evento.
¿Qué podemos concluir de todo esto?
¿Luka Doncic ha hecho méritos para ser elegido para el All-Star Game? Sí, por supuesto que sí, el que lo dude simplemente tiene una venda en los ojos que no le deja ver que ha nacido una estrella. Sin embargo, ¿Luka Doncic debería ser elegido para el All-Star Game? Pues viendo toda la competencia que hay en el oeste, la cantidad de jugadores que están haciendo temporadas similares o mejores, teniendo un mejor récord del equipo… Probablemente no. No debemos dejar que el hecho de que Luka nos haya conquistado el corazón a muchos nos ciegue ante el hecho de que estamos ante un oeste durísimo, donde hay que bordar la perfección para estar entre los mejores. Luka Doncic será All-Star muchas veces en su carrera, no cabe duda de ello, pero probablemente éste no sea el de su debut. Pero tiempo al tiempo, que el chico va a arrasar.
Gustavo Zaragoza @joelembiidia
Brutal amigo Gustavo! Completísimo! Muchas gracias!
A ti por tu comentario!! 😀